El viernes 19 de septiembre a las 4 de la tarde, 23 chicos y 5 profesores se juntaron en el “Centro Botín” para dar comienzo a una tarde lúdica de paseo en bici hasta la Concha de Villaescusa.
La “serpiente multicolor” comenzó su andadura con buen humor y buen ritmo, aunque en el primer tramo por Santander, el ritmo lo imponían los pasos de cebra y semáforos que hay que sortear hasta abandonar la urbe.
Pasado “El Astillero” el camino posibilitó una marcha más tranquila y en grupo por un entorno de sobra y bosque que fue del agrado de todos.
El calor iba haciendo que las reservas de agua en los botellines, y energía en la piernas, fuesen decayendo, afortunadamente para ese momento ya les estaban recibiendo, con una sonrisa, agua y merienda, David y Zuga, el equipo de apoyo incondicional.
Tras un rato de juego, merienda y descanso y calculando el tiempo de retorno se pusieron de nuevo manos, o mejor, pies, a la obra para, cogiendo en este caso el camino que pasa por Liaño y por la senda del aeropuerto, volver hasta el centro botín.
Una experiencia bonita de un grupo de chicos que supo superar las dificultades con entusiasmo y respetar al resto de usuarios de la vía con educación.